Declaración Pública
Santiago de Chile, 28 de mayo 2022
Fundación EPES se suma este 28 de mayo a la campaña permanente de acción por la salud integral y los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, impulsada desde hace 45 años internacionalmente por la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe.
El 2022 nuestro foco es la sobrecarga de trabajo doméstico y de cuidados que recae sobre las mujeres, de forma desproporcionada, no remunerada y precarizada, y el impacto que genera en su salud física, mental y emocional, autonomía económica, posibilidades de participación social y en su desarrollo personal.
Al no existir una red de apoyo para el cuidado de personas mayores, en situación de dependencia por discapacidad y enfermedad, o se restringen los servicios de cuidado y educación de la niñez -como ha ocurrido durante la pandemia- aumenta la carga de estas labores sobre mujeres de todas las edades, lo que les impide acceder a empleos remunerados y a educación.
La falta de reconocimiento del trabajo de cuidados, imprescindible para sostener la vida y el desarrollo de la sociedad, es una forma de opresión y violencia contra las mujeres que han subsidiado históricamente lo que debiera entenderse desde la corresponsabilidad, situación que se ha agudizado en el contexto de crisis sociosanitaria.
Con una población que envejece gradualmente es urgente que el Estado reconozca que la actual organización social de los cuidados intensifica las desigualdades económicas y de género existentes, y que las personas que asuman este trabajo deben contar con protección, capacitación, ayudas técnicas y un sistema de seguridad social que les asegure bienestar y los recursos necesarios para una vida y vejez digna.
POR LA SALUD Y BIENESTAR DE TODES
EL ESTADO DEBE GARANTIZAR EL DERECHO AL AUTOCUIDADO, A CUIDAR Y SER CUIDADAS
